El Restobar 12 Lunas se llenó de metal y punk rock
Nota de Eduardo Ramos Carvajal
El evento reunió a Azte Zombie (Tributo a Misfits) Alcohólica (Tributo a Metallica) y a NightMare (Tributo a Avenged Sevenfold). En una velada de sábado por la noche cargada por la intensidad metalera y el desenfreno característico del punk.
Todo comenzó a eso de las 22:30 horas en una noche fría de sábado en el Restobar 12 Lunas. No obstante, el público que llegó estaba totalmente animado, cerca de 200 personas llegaron al lugar finalmente para disfrutar de una velada que prometía revivir la potencia del rock pesado, en sus diferentes vertientes. Tanto Metallica como Misfits y Avenged Sevenfold son estilos que tienen sus características propias, sin embargo, los reúne el espíritu, la rebeldía y las guitarras saturadas.

Fotografía de Juan Aguilera
La primera banda apareció en la tarima, los encargados de encender los fuegos son Azte Zombie. Un grupo de muchachos muy jóvenes, pero no hay que dejarse engañar por ello, los chicos mostraron talento, desparpajo y mucho punk. Entregando así una música que lo requiere y lo necesita, como lo son Los Misfits. Desde el primer momento se fueron ganando a su público, con una gran interpretación instrumental, sonido compacto y ensayado, además de una gran voz líder. Todo esto sumado dio como resultado un tremendo set con las canciones más icónicas de Misfits y una participación notable por parte del público presente. Una tocata que sorprendió para bien.

Fotografía de Juan Aguilera
Posteriormente, y con más público que iba llenando 12 Lunas llegó el turno de Alcoholica. La banda tributo originaria de la cuarta región comenzó su sesión con un video que relata su historia y motivaciones. Tras ello, se dio inicio a la tocata, marcada por los himnos de Metallica. El show se destacó siempre por un excelente sonido y puesta en escena, quedando en claro la gran trayectoria del conjunto. Desde los instrumentos hasta la interpretación se notaba un gran trabajo y energía para lo que fue la presentación. En este sentido, cabe indicar que el público desde el primer momento comenzó con las famosas mochas y se mantuvieron hasta el final, una tocata que revivió el viejo espíritu del rock.

Fotografía de Juan Aguilera
Eran cerca de las una de la mañana, cuando fue el turno del último show de la noche. La mayoría del público seguía allí en el Restobar 12 Lunas con su esa energía característica. De un momento a otro comenzó el espectáculo de NightMare. Los chicos se ubicaron en la tarima con bastante actitud y rudeza para interpretar la cantidad de éxitos de Avenged Sevenfold. Como fue la tónica de la noche este conjunto también demostró una inmensa capacidad de trabajo en la interpretación, sumado a una voz líder muy destacada y por cierto similar a la del vocalista original .El concierto avanzó de forma muy compacta de principio a fin, con esa característica potencia heavy de Sevenfold, que se vio en cada miembro del tributo. Un excelente show para cerrar la velada en 12 Lunas.

Fotografía de Juan Aguilera
Así es como en Restobar 12 Lunas se vivió nuevamente una jornada cargada al rock, en esta noche en especial dedicada al rock metal y el punk. Una velada que convocó a una sorprendente cantidad de público que pudo disfrutar de unos tributos de gran calidad, muy bien trabajados y preparados para la ocasión. Una tocata donde se puede concluir que el rock sigue más vivo que nunca.